Como si no existiera el mundo

El mundo no existe, dios tampoco, por eso no hay que escribirlo con mayúscula.
Sólo existe el tedio, la abulia, la soledad y la pesadumbre

lunes, 5 de diciembre de 2011

La trampa del puente

Somos gilipollas. Eso está claro y esta semana más.

Esta semana nos convencen de que podemos descansar. De que celebramos una constitución creada bajo el miedo de las pistolas y para compensar una fiesta religiosa, no sea que Rouco se enfade y nos mande a todos a los fuegos del averno. 

El 5 descansan unos, otros el 7 pero los más el 9 que para eso les hemos dado fiesta a los crios en el cole y habrá que hacerse cargo de ellos y si la crisis no te ha puesto en la puta calle, hasta te los llevas de viaje. Así de paso consumes que en contra de lo que dicen algunos es de puta madre, porque das de comer a los gasolineros, hosteleros y supermercaderos.

Vuelves hecho una mierda, eso sí, porque nada ha salido como esperabas. Te has chupado 12 horas de coche entre ida y vuelta. Has tenido bronca con la parienta porque Guille no quería comer y te ha jodido la única hora en la que podías disfrutar comiéndote un entrecot en el "Asador Mishuevos" por el que has pagado 30€. Además de otros 30 por el de tu costilla, 30 más por las chuletillas de Mariló y 20 por el menú infantil de Guille, que el perro del dueño del restaurante sabrá apreiar mejor.

Te espera el lunes 12, prefacio del martes 13 en el que Don Armando Mamírez, tu director general, te vueleve a preguntar por las ventas de la semana que no ha existido. "¡Pues habrá que recuperar, Mortález!" bramará mientras golpea la mesa y detrás de las gafas bifocales sus ojos parecerán más pequeños y furiosos que nunca.

Esa noche no duermes y te duele el estómago. Piensas que son las croquetas que te preparó Loli, con todo cariño y para ver si se te pasa la mala hostia que cree que es todavía por su culpa, la pobre. Pero nó. Tu estómago se resiente por la hiperacidez que te produce el estrés de tu trabajo, el látigo de Mamírez, un amargado especialista en amargar y la angustia de quedarte sin curro, en este ambiente tn bien preparadito de crisis.

Los del 15M siguen con sus blogs y sus tambores, pero cuando en un año se les acabe a más de 500.000 ciudadanos el subsidio de 420€, se les unirán, tal vez con cuchillos.

Mientras tanto, disfrutad del puente, que es mentira.